Llanta de repuesto: Las llantas de repuesto suministradas con el automóvil suelen ser más pequeñas que las llantas principales. Hay algunas razones importantes detrás de este pequeño tamaño que no sólo están relacionadas con el diseño y la seguridad del coche. Más bien, también garantiza la practicidad.

Mejorar el peso y el kilometraje

El objetivo principal de mantener la llanta de refacción pequeña es reducir el peso del automóvil. Un tamaño de neumático más pequeño es más ligero. Por lo que el peso del coche se reduce y esto tiene un impacto directo en el kilometraje. Los coches más ligeros consumen menos combustible. Lo que ahorra combustible y además tiene un menor impacto en el medio ambiente.

Ahorro de espacio y más conveniente

Usar una llanta de refacción más pequeña ahorra más espacio en el vehículo. Esto proporciona la posibilidad de almacenar más artículos dentro del vehículo. Especialmente en SUV y coches pequeños donde el espacio es limitado. Allí esta característica resulta muy útil.

Diseño para uso temporal.

La rueda de repuesto se utiliza principalmente en situaciones de emergencia. Está diseñado para llegar únicamente a la estación de servicio más cercana. Dónde puede reparar o reemplazar su neumático principal. No está diseñado para largos periodos de tiempo ni alta velocidad.

reducción de costes de fabricación

La producción de neumáticos más pequeños es más barata (reducción de costes), por lo que los fabricantes de automóviles reducen el coste de los neumáticos de repuesto. Esto no tiene ningún impacto importante en el precio total del coche. Lo que hace que esta opción sea más práctica y económica para el consumidor.

Menos impacto en la conducción

Una rueda de repuesto más pequeña tiene menos impacto en el sistema de frenado y dirección (impacto mínimo en la conducción), lo que facilita el control del vehículo en caso de emergencia. Aparte de esto, recuerda al conductor que no lo conduzca durante períodos prolongados o a altas velocidades.